Préstamos Quirografarios
Entre las principales soluciones financieras para los problemas económicos de un negocio, se encuentran los préstamos quirografarios. Sin embargo, muchas personas al día de hoy no tienen una idea clara sobre cómo funcionan este tipo de prestaciones. Por esa razón, muchos emprendimientos no logran conseguir el éxito que merecen y terminan en quiebra.
Este tipo de préstamos son una espléndida opción para solucionar la falta de liquidez que pueda presentar un negocio. En especial, porque se suelen tramitar de una manera rápida y segura, sin comprometer las finanzas del cliente a corto o largo plazo. De hecho, estas son prestaciones que pueden terminar dando muchas ventajas al beneficiario.
¿Quieres saber cómo funcionan los préstamos quirografarios? En el artículo de hoy te explicaremos todo lo que necesitas saber sobre estos trámites financieros.
¿Qué es un préstamo quirografario?
Se trata de un préstamo a corto plazo que se otorga con la intención de sacar a los solicitantes de algún tipo de aprieto financiero. Puede ser para pagar deudas o por falta de liquidez económica en un negocio. Estos se suelen tramitar de una manera rápida, por el historial de solvencia moral y económica que debe poseer el cliente que lo solicite.
Por lo general, este tipo de créditos suelen caracterizarse por la inmediatez y los cortos plazos de pago. Los préstamos quirografarios tienden a pagarse en un periodo de tiempo de 30, 60 o 90 días. En caso de que se necesite más tiempo para completar las cuotas, el cliente debe informar con anticipación a la financiera o entidad bancaria en cuestión.
En líneas generales, son muchas las características que representan a este tipo de préstamos. Entre las principales, podemos destacar las siguientes:
- Son trámites que se suelen completar sin la necesidad de una autorización notarial.
- Para conseguir la aprobación de la prestación sólo se necesita firmar uno o varios pagarés privados.
- Tu patrimonio personal es la única garantía que se requiere para solicitar este crédito inmediato.
- Los préstamos quirografarios cuentan con pagarés asociados para facilitar el proceso de cobranza.
¿Cómo obtener un préstamo quirografario?
Es importante que tengas en cuenta que no hay una forma universal de solicitar este tipo de préstamos. En especial, porque cada institución cuenta con sus propios reglamentos y requisitos para tramitar este proceso.
Por lo general, la mayoría de instituciones financieras y entidades bancarias permiten que sus clientes soliciten estos préstamos desde la web. Sin embargo, el proceso puede cambiar de una manera u otra. Lo usual es que puedas obtener una prestación de este tipo a través de los siguientes pasos:
- Entra en la página web oficial del banco donde planeas solicitar los préstamos quirografarios.
- Luego, entra en la sección de préstamos para elegir la opción del préstamo quirografario.
- Ingresa tu número de cédula o cuenta junto a la clave del usuario. Seguido de ello, rellena el formulario para actualizar los datos.
- Ahora selecciona el monto y el plazo de pago. En la tabla de amortización podrás calcular el monto que tendrás que pagar.
- Por último, escoge el destino del préstamo y marca en los botones de Aceptar y Continuar.
Dependiendo de la institución bancaria o entidad financiera, el periodo de respuesta para la solicitud puede cambiar. Lo usual es que estos tramiten la aprobación o el rechazo de los préstamos quirografarios en cuestión de minutos. Sin embargo, hay ocasiones en los que puede tardar hasta 24 horas.
Requisitos de los préstamos quirografarios
Al igual que el proceso de solicitud, cada banco y financiera disponen de sus propios requisitos para obtener un préstamo quirografario. Por lo tanto, primero debes contactar con ellos para conocer cuáles son las exigencias que solicitan para conseguir la aprobación.
En la mayoría de los casos, estas tienden a ser parecidas y fáciles de conseguir. Para que no tengas que esforzarte mucho con ello, en la siguiente lista te contaremos cuáles tienden a ser dichos requisitos para los préstamos quirografarios.
- Disponer de garantías reales que el banco pueda comprobar. Por ejemplo, los fondos que tienes acumulados en tu cuenta.
- Debes ser un afiliado activo dentro de la entidad bancaria y contar con una cantidad mínima de aportaciones.
- Hay que contar con créditos en liquidación y no tener uno vigente en el momento.
- No puedes estar tramitando un préstamo hipotecario al momento de la solicitud.
- Necesitas estar dentro del rango de edad necesario y presentar una identificación oficial.
- Llevar un comprobante de domicilio y uno laboral con antigüedad máxima de 3 meses.
- Hay que ser transparente con respecto a tu información legal y financiera para obtener los préstamos quirografarios.
- Se suele requerir que el cliente tenga una línea de crédito aprobada y vigente en el banco.
- Tienes que dar autorización para que la entidad bancaria pueda chequear tu Buró de Crédito.
Estos requisitos suelen ser los más comunes, aunque puede que tengas que cumplir con otros adicionales. En algunos casos, los bancos solicitan que especifiques la manera en la que vas a emplear el dinero del préstamo.
Condiciones de los préstamos quirografarios
En la actualidad, la gran mayoría de entidades bancarias y financieras dentro de México cuentan con sus propias condiciones en este tipo de trámites. De este modo, se pueden asegurar que todos los préstamos quirografarios tengan éxito para ambas partes. Las condiciones estándar tienden a ser las siguientes:
- El monto de financiamiento depende de la capacidad de pago que tenga el solicitante.
- Los plazos máximos se establecen antes de la aprobación del crédito.
- La tasa de interés del préstamo varía según el plazo estipulado para el pago de las cuotas. Estas se pueden reajustar cada 6 meses.
- Los solicitantes cuentan con la opción de elegir el sistema de amortización que prefieran. Pueden escoger entre cuotas fijas y cuotas decrecientes.
- Desde el principio el cliente debe establecer su capacidad de endeudamiento. Lo usual es que se permita hasta el 50% de sus ingresos.
Puede que haya otras condiciones a las que tengas que llegar a un acuerdo con el banco o financiera. Sin embargo, las mencionadas previamente son las principales y más importantes de todo el proceso.
